SOLES
Los soles asoman y alumbran hasta las zonas más sombrías.
Encienden las tinieblas.
Aun cuando no se ven, brillan. Por la elemental circunstancia de la memoria.
Por las noches, prosiguen su tarea
Es una labor enorme y tenaz, que trasciende geografías.
Soles militantes, potentes, aguerridos.
Se ensombrecen las jornadas y persisten: es que la obcecación no obedece a las coordenadas del tiempo.
Son soles bisectrices , como crucificados.
Ocupan todos los confines y vencen a los siglos para confirmarse en la certeza de que el sol es vida.
Encienden el paisaje con sus luces.
Luces,
Cincuenta y dos fulguraciones para comenzar a ver.
Se perciben también otros soles.
Nacientes, galácticos.
Tan distantes pero tan cercanos.
Lucen inocentes, como niños.
Apenas amanecen en nuestro firmamento y ya se dilatan en los confines.
Anticipan albricias y cobijos, alboradas de tibieza para nuestras germinaciones.
Vienen del otoño, Soles Primavera.