
Delfor Sombra hunde su diapasón en las inmensidades de Chiapas e instala una milonga baya a modo de presentación. Hace un tiempo que sobrevive en México huyendo de los chaffes que lo acosan en el país del monte. En una pequeña escuelita que prologa los misterios de Lacandona Delfor desmenuza historias del medanal y el desarraigo. Dice y canta quién es con la sexta en Re .Cuando concluye escucha azorado que el director y los alumnos le dicen que ellos aman a un pedagogo pampeano cuyos libros enriquecen y honran su biblioteca. Delfor no sabe cómo explicarles que ese pedagogo, Ricardo Nervi, impulsado por las mismas razones de su exilio vive precisamente en el piso superior del edificio donde ambos se alojan.