TIEMPO DE CERTEZAS
Armonías del cosmos: cuando este libro gane la calle se cumplirán cuarenta años desde la
creación del Movimiento Popular Pampeano
por los Derechos humanos.
Ahí e hospeda el
filamento de una simetría: no solamente una lisonja a la efemérides sino también a la obtención
de un inapelable laurel contra la falsedad. Que no otra cosa
impregnó las voluntades de aquellos fundadores. Orientaciones que se
prorrogaron en la matriz del otro
colectivo que enarboló esas banderas
en los
juicios a laSubzona 1, 4.
Al flujo de cuyos contextos germina
esta iniciativa editorial.
En los extremos de tales décadas el mismo dilema: ¿cómo
dilucidar esto que asoma con la apariencia de
un crimen perfecto: el asesinato de la realidad consumado por su relato?
No estaría mal, lucubramos, pensar a la verdad como el
triunfo del “Ángel de la Historia”. O quizás,
la revancha de los negados.
En los estertores del
siglo XIX la falacia encubrió la masacre con la fórmula de “campañas al
desierto”.
Escribas y notorios
representantes de la
generación del ochenta completaron el
discurso expiatorio (tapadera de un formidable negocio inmobiliario) haciendo
progresar en la conciencia pública la contradicción “civilización o barbarie”.
Abunda la literatura en tal sentido. Uno de estos literatos, afanoso profanador de tumbas, se adentró en nuestro
territorio tras el objetivo de mensurar
las quince mil leguas y verificar la eficacia del proyecto de
limpieza étnica.
Cien años después, el pregón no fue diferente. La modernidad,
orden y organización, la isla de paz
y la fecundación de esa teoría , tan
tramposa como binaria , de los dos demonios.
Ahí reside la pugna: postulamos a la verdad, concebida por el
conocimiento cabal del escenario, los
consensos éticos, elaboraciones espirituales y materiales de la sociedad. .Incluso,una legitimidad que
no descanse en la comodidad de la
apodíctica y se someta a exámenes, científicos y morales, cuando de la defensa
de la humanidad dependa su destino. Y en su reverso, una versión maniquea, maliciosa y corrupta de ese entorno.
Así las cosas la búsqueda de la certeza conlleva,
necesariamente, perforar las entrañas de
la mentira. Sus razones, objetivos, estrategias para adulterar nuestra
manera de concebir la vida.
Lo postuló Adorno, en los vislumbres, opacos, de una nueva
época: impedir que Auschwitz retorne
sobrelleva explorar sus intersticios.
Aquí radica el enorme
tributo de la propuesta. Un texto que atesora pulsiones militantes
con enjundia doctrinaria y procura desentrañar todas las veladuras de la
verdad hasta que ésta deje de ser una utopía
convirtiéndose en derecho. Esto
es, bajarla de la pancarta y pasar a
ejercerla.
Recorremos las páginas y experimentamos un legítimo orgullo
porque la autora provenga de aquí, del lado pájaro de la utopía, de este
solar de desvelos, de una comarca dos veces flagelada por un plan genocida.
En la academia se la reconoce: doctora Ivana Romina Barneix,
Secretaria del Observatorio de Derechos Humanos .entre otras responsabilidades.
Para nosotros es “Iva”, la muchacha que vino a enriquecernos con sus aportes,
representarnos, impregnarnos con su visión de género y fortalecer la
cofradía del abrazo, fraguado en estos
entreveros, feroces, con los apóstoles de la noche más oscura.
La vimos, sus barbijos claros , escudos ante la peste,
trocados en corazas contra los canallas.
Tenaz, dilatando evidencias. Describiendo
un sumario del horror que incomodó a los exégetas de la
obediencia, afiliados a las sociedades de la negación, del olvido, del
silencio.
¡Cuarenta años, los mismos que la democracia!
Aferrados a estos
caudales patrimoniales, nos aprestamos a
celebrar la aparición de este compendio de fundamentos y tensiones ante los cuales no se concibe la
indiferencia.
El presente aporte teórico os encuentra, pertrechando cobijos propicios para la memoria, Procurando acceder a sus contenidos emancipa
torios, precedentes en la traza de
redimir la historia. Certidumbres,
horizontes que conduzcan a la construcción
de un mundo nuevo y mejor, en donde cobijar los sueños.
Bienvenido este tratado.
Sus páginas son alas. Y cuando ese vuelo despierte una
emoción en un lector ignoto, toda vez
que su
presencia propicie una idea auspiciosa, o se lo empuñe como una
herramienta de trabajo, constataremos su vigor, Sin urgencias, encaprichados de
porvenir, porque ya sabemos,
aprendizajes del medanal, que el tiempo es
el progenitor de la verdad y la memoria
su descendencia.
J:C:P
Julio 2023
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