domingo, 21 de septiembre de 2025

La barca

El muro que abraza el ala sur del Hospital de Zona Lucio Molas ya no es solo concreto: es testimonio.

Allí, donde la vida se defiende día a día, decenas de manos se alzaron con pinceles como estandartes, gritos que se niegan a callar.

Al mediodía, de este domingo 21 de setiembre, la barca estaba lista. No surcará las aguas de Túnez, ni flameará cual   bandera en las calles de Euskal Herria, ni se alzará , proclama airosa,  en las arterias del mundo que se rebela ante la voracidad de la muerte.

Tal vez emprenda una travesía breve, por este océano de arena que llamamos pampa.

Pero su desafío es otro: permanecer anclada en este lugar en que   se lucha por la vida, donde aún persiste la vieja leyenda  que dice que “el silencio es salud”.

Esta barca y sus tripulantes no aceptan esa consigna.

Han venido a izar, en el mástil más alto de nuestra dignidad, una verdad que no se puede ignorar:

Ante el genocidio en Gaza, el silencio, mata.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

La barca

El muro que abraza el ala sur del Hospital de Zona Lucio Molas ya no es solo concreto: es testimonio. Allí, donde la vida se defiende dí...